La más peligrosa es la diabetes, un problema de salud que sufren más de 190 millones de personas en todo el mundo. Siempre se ha sabido que este aumento del nivel de glucosa en la sangre, también conocido como hiperglucemia, podía provocar pérdida progresiva de visión, pero que los diabéticos presenten una menor audición no está tan estudiado.

¿Cómo afecta la diabetes a la hipoacusia?

Varios estudios han demostrado que los diabéticos tienen una probabilidad 2,15 veces mayor de desarrollar un problema auditivo en comparación con el resto de la población, es decir, un 200 % más. Este riesgo es agravado con la edad y empeora al tener las dos afecciones, afectando negativamente a la calidad de vida.

Un reciente estudio del Departamento de Neurología de Detroit, EE.UU, ha probado que los pacientes con diabetes 1 y 2 sin tratar eran más propensos a padecer pérdidas auditivas, con casi un 30% más de riesgo, que los enfermos con tratamiento. La hiperglucemia daña el nervio cocleovestibular del oído causando hipoacusia súbita (pérdida parcial o total de la capacidad auditiva). Se trata de un problema de oxigenación. La espesa sangre no llega a los vasos más pequeños del oído, que degeneran y desaparecen.

La diabetes tipo 1 es provocada por la destrucción de las células que producen insulina, las células beta del páncreas, por un mecanismo de agresión del sistema inmunitario. La insulina, que es una hormona que regula la concentración de glucosa en la sangre, deja de producirse, por lo que los diabéticos deben ser tratados con inyecciones de esta hormona. Y la diabetes tipo 2, en la que se sigue produciendo insulina, pero en cantidad insuficiente para controlar los niveles de glucosa en la sangre, es decir la glucemia.

¿Cómo tratarlo?

Incluso es posible detectar diabetes cuando el paciente empieza a tener problemas en los oídos como zumbidos, ruidos, mareos o vértigos. El único modo de controlar el nivel de glucosa de la sangre es la medicación y el control del peso mediante una dieta equilibrada. La ingestión de grasas saturadas, demasiado azúcar y alcohol y el consumo de tabaco degeneran muchos tejidos del cuerpo humano incluyendo, por supuesto, los del oído. 

La solución, como el habitual, pasa por la prevención. La revisión anual a la que deben someterse los diabéticos debe incluir la completa revisión del oído y la receta de audífonos para solucionar la pérdida de audición. 

No hay que olvidar que las personas que oyen poco y mal pueden desarrollar problemas psicológicos tales como la automarginación anímica o la falta de confianza. Por eso, no dude pedir cita en cualquiera de nuestros centros auditivos Optisur y nuestros profesionales le harán un estudio completo de tu oído y ofrecerán el audífono que más le convenga a su pérdida.