El síndrome de la sordera súbita (SSS) es un cuadro de hipoacusia neurosensorial de 30db o más, entre moderada y grave, que aparece de manera inexplicable y repentina, ya sea de manera inmediata o en el trascurso de unas horas.

¿Que produce la sordera súbita?

La sordera súbita ocurre porque algo deja de funcionar en los órganos sensoriales del oído interno. Sus causas no están determinadas, pero se dividen en tres categorías: causa desconocida, suceso evidente o enfermedad subyacente, aunque tan solo el 10% de los casos tiene una causa identificable.

Ocurre entre 5 y 20 casos por cada 100.000 habitantes al año, se suele producir con más frecuencia en primavera ya que se ha relacionado con la posibilidad de se produzca debido a los virus. Como sucesos evidentes se consideran los traumatismos o las infecciones cerebrales. También se incluyen en este apartado los fármacos ototóxicos, que como efectos secundarios puede dañar el sistema auditivo.

Por último, están las enfermedades subyacentes como pueden ser tumores, cáncer o algunos tipos de esclerosis, que pueden afectar al funcionamiento del oído interno.

Dependiendo de la edad la sordera súbita puede deberse a diferentes causas:

• Entre los 25 y los 40 años la principal causa suele ser la vírica.
• En el 25% de las ocasiones suele ser debido a un catarro de las vías aero-digestivas superiores. Algunos virus causantes de este síndrome pueden ser: parotiditis, sarampión, herpes zoster, influenza y adenovirus I y III
• Entre los 50 y los 65 años, es la edad más frecuente, los trastornos vasculares suelen ser la causa de la aparición de la sordera súbita.

¿Cuál es su tratamiento?

La mitad de las personas con sordera súbita recuperan parte o toda la audición de manera espontánea en el transcurso de una o dos semanas desde el inicio de los síntomas, pero retrasar el diagnóstico y el posible tratamiento, puede disminuir la posibilidad de recuperación. Los expertos calculan que cada año la sordera súbita afecta a entre 1 y 6 personas de cada 5000, aunque la cantidad real de casos podría ser mucho mayor, debido a su difícil diagnóstico.

Se estima que la mitad de las personas recuperan parte o toda su audición de manera espontánea, pero retrasar el diagnóstico y el inicio del tratamiento dos semanas puede disminuir su eficacia, según aseguran los expertos.

Respecto al tratamiento se aconseja reposo en cama de 3 a 7 días. Los corticoides especialmente es el tratamiento más común sobre todo si se desconoce la causa, si el especialista puede determinar un tratamiento sustitutivo o adicional en función del motivo de esta pérdida súbita, como podría ser antivirales si se tratara de que ha podido ser causa vírica.

Las personas que sufren esta patología no acuden al médico de manera inmediata, ya que, se tiende a relacionar la pérdida auditiva con problemas comunes como alergias, sinusitis o cera en el conducto auditivo. Sin embargo, esto es un error, insistimos en la importancia de acudir al otorrinolaringólogo de inmediato.